Sumario
1. FÉ
DE VIDA VII: por
Laus Deo
2.
TESTIMONIO DE VIDA: por Juan Quintín
3.
BAGATELAS POLÍTICAS: por Inés España
4.
EL BUEN VIVIR: por Luigi Palatino
5. ESQUINA
OESTE CINE: por Julia Blanc-sec
6. ESQUINA
OESTE TEATRO: por Julia Blanc-sec
7. EL
OIDO MUSICAL: por Ludwig von Krefeld
8.
LEYENDAS URBANAS
9.
AL DIRECTOR QUE LE DEN
EL CHAFARDERO CALLEJERO
Por
Laus Deo
Como en años anteriores,
llevo mi atrevimiento a entrevistar a nuestro amado Director, publicando su
EL CHAFARDERO CALLEJERO
Por
Laus Deo
Como en años anteriores,
llevo mi atrevimiento a entrevistar a nuestro amado Director, publicando su
FÉ DE VIDA VII
UN, DOS, TRES, LLEGA A LOS 83
Reportero
Laus Deo:
Nos encontramos
entrevistando un año más al jovenzuelo Luis Díaz Garrido quien, en el día de
hoy festividad de San Prudencio, ha alcanzado los 83
Senior
Director Happy birthday to you
¿Cuáles son sus impresiones?
- · El que me haga todos los años la misma pregunta es verdaderamente cansino, pero lo puedo aguantar. Ahora, que este año me felicite en inglés me parece pedante y muy alejado en estos tiempos de nacionalismos
- · Tampoco le consiento lo de “¡Felicidades, tronco!”
- · La pregunta aún puedo contestarla. El año que viene Dios dirá y dependerá de si hay cobertura adonde Él me lleve
- · En cuanto a las impresiones, esta vida la vivo como leyendo una revista ilustrada. Solo me fijo en los dibujos y en las láminas coloreadas.
- · Una vez más tengo la satisfacción de compartir con familia y amigos
- · He llegado a los 83 y empiezo a sentirme un guinness.
¿Qué cambios ha tenido
este último año?
- · Pues ninguno. No me ha crecido el pelo.
- · He notado que me ofrecen asiento en el tren y que me agarran del brazo para cruzar la calle. Nunca es una jovenzuela. Son señoras mayores que intentan meterme mano.
- · Mis visitas a los médicos son más frecuentes y el quinto gin-tonic noto que me empieza a sentar mal
- · Este año he cumplido el objetivo de no ponerme corbata en ninguno de sus 365 días pero no pienso dejarme coleta
 |
| Histórica foto con mi última corbata y mi penultimo oporto |
¿Tiene algo especial este
día para Ud., mi amado Director?
- · Agradezco a este Gobierno el que haya elegido el día de mi patrón San Prudencio para hacer las elecciones generales.
- · Así votaremos con prudencia y haremos caso al “si bebes, no votes”
¿Algo más?
- · Sigo sin cambiar de coche. Es alto y, pese a mis dolores, me permite bajarme con la misma gracia que las mocitas deslizándose desde la grupa de la jaca.
No es por nada y con el
respeto debido, Ud. de mocita no tiene nada
- · Tampoco tengo jaca, imbécil reportero
¿Cómo le va en
su relación con El Noctambulo?
- · Tal como lo pregunta, parece que todas las noches me voy de copas con un amigo.
- · Si no es Ud. présbite o miope, verá en el encabezamiento que vamos por el número 41 y el Puchi presuntamente nos lee desde su Waterloo, que como todos sabemos y practicamos es un buen salón de lectura
- · Hoy día mi ilusión es llegar a las 3.000 visitas del blog
·
Aprovecho:
Sean cuales sean los
resultados electorales de hoy, “se me secan ustedes” las lágrimas y
nos leen, haciendo clik con cariño en el enlace
(No me permiten
meter cuñas publicitarias en mis entrevistas.)
En todos estos años
además de dar el coñazo a sus congéneres, ¿ha hecho algo útil?
- · No se me encabrite mi amigo.
- · He encargado a mis colaboradores Marelvis Orellana, Juan Quintín y Sir Lewis Wooster que escriban mis memorias y las publiquen, por entregas, en El Noctambulo.
- · Si Ud., plumilla descerebrado, tiene interés puede leerlas y comprobar que como el Tenorio, “a los palacios subí y a las cabañas bajé”
¿Ha notado cambios en
estos años?
- · Esa pregunta demuestra que la propaganda electoral le ha producido a Ud. una diarrea cerebral y me dan ganas de despedirle, anulando ahora su contrato basura.
- · Cambios todos.
- · Mi abuelo estrenó la electricidad doméstica, los coches, los aviones, la radio y el teléfono y alguna cosas más…
- · Mi padre se desayunó con la televisión, lo supersónico, el cine a lo bestia, las canciones de Raphel y de Antoñita Moreno, la cocacola que nunca bebió y las tortitas de nata que nunca comió, la Champions y el Cordobés…
- · Por mi parte, he sufrido internet, los móviles, las autonomías, los destapes, los ecologistas, los políticos que no son gobernantes, las manifestaciones de unos y de los otros y de las otras…
- · O sea en tres generaciones nos han puesto del revés.
- · Le pongo un ejemplo: ayer era viernes y sufrí colapsos de circulación en el centro de Madrid, por desfiles o caminatas en patines y bicicletas, que celebran los últimos viernes de cada mes. Tenga en cuenta que en mis tiempos se celebraban los primeros viernes de mes de una forma muy distinta.
- · De todas formas, con la imagen siguiente puede Ud. maldito reportero, con las neuronas que le queden visualizar el cambio
Por supuesto, se ve el
cambio significativo en la diferencia entre mantener un perro en brazos y no
tener a un diputado en brazos, en la foto que encabeza la entrevista.
Me puede decir ¿qué hacía
Ud. el Congreso?
- · Poca cosa, como todos los que van al mismo.
- · No es solo tener en brazos a un diputado o a mi perro Stan esperando la bendición de San Antón que todos los años en Enero se impartía a los animales
- · Acompañaba a mi hija Marta, como coautora de una propuesta-solicitud para pedir la equiparación social y salarial para los discapacitados, que en esa tarde se leía ante la Presidenta del Congreso y unos cuantos diputados somnolientos de la oportuna Comisión.
¿Sigue con su afición
culinaria?
- · Por supuesto. En su día fue una cuestión de supervivencia. Ahora viene a casa una moza de allende los mares. Ha aprendido a preparar brócoli con pimentón, lentejas con chorizo y albóndigas con carne. Me ha mandado al banquillo de los fogones.
- · Sigo dedicándome a conservar en mi bodega el numerus clausus de botellas del vino que calienta las carnes.
- · He colgado el delantal y es mi buen amigo Luigi Palatino el encargado de exponer, en las páginas de El Noctambulo, mis recuerdos relacionados con jugos y sabores.
Toda la redacción,
deseamos que siga como Director por
muchos años
- · Como apostillaba en años anteriores: Si Dios quiere.
- · (Añado que me parece usted un poco pelota.)
·
Sigo dando gracias de que mis días tengan
más de 24 horas. O sea, el horario de Canarias.
TESTIMONIO
DE VIDA
ESPERA II
Por Juan Quintín
Entre mi
salida del Ramiro y mi entrada en la ETS de Ingenieros Industriales, sucedieron
unos años que considero como de espera, para no
decir en plan cursi de vigilia antes de la batalla.
Admito que
fueron años de cierto desmadre.
Para poder
adquirir conocimientos y así superar las absurdas pruebas de Ingreso, acudía a
una Academia de preparación.
Había varias
en Madrid, algunas especializadas en una ingeniería en particular y otras de
multiuso
Todas ellas
en pisos de casas antiguas del centro de Madrid. Pisos antiguos con amplias
estancias que en su día debieron servir para recepciones o merendolas.
Yo iba a una
situada en el primer piso o principal, como se decía antes, de una antigua casa
de la calle del Prado. Enfrente había un local de billares, lo cual era una
tentación, no para mí que no me gustaban las bolas
En un
descanso entre clase y clase, bajábamos a una tienda de Ultramarinos, nombre
utilizado antes de la llegada de Carrefour. En ella,
un amable tendero nos proporcionaba una barra de pan, la abría y con delicadeza
la decoraba con lonchas de salchichón o chorizo, cortadas a cuchillo.
Había un
compañero cuyo bocadillo era de berberechos con
salsa y todo.
Como era un
piso de los antiguos, tenía amplios balcones donde solíamos comer los bocatas y
respirar fuera de la densa atmosfera interior;
porque entonces se permitía fumar.
La Academia
hacía esquina entre la calle del Prado y una calleja donde había una pequeña,
estrecha y vieja casa, que al parecer se dedicaba a dar cobijo a las parejas
ocasionales o furtivas.
Desde el
balcón jaleábamos cuando descubríamos a una moza que,
como estaba mandado, iba por delante del maromo que la seguía a varios pasos,
hasta que llegaban a la casa.
Los
profesores practicaban el deporte nacional de entonces que era el pluriempleo.
Por eso, las clases eran por la tarde. Uno de ellos venía de uniforme de
oficial de aviación. Era Ingeniero Aeronáutico y su misión consistía en
apasionarnos por la Geometría Descriptiva. No tuvo mucho éxito, pese al bigote
y el pelo negro como de azabache. Fumaba como una chimenea. Creo que se llamaba
Robles o algo así. Había otro profesor que en vez de uniforme venía de
trapillo, tal vez porque su otro trabajo era de maestro de escuela. Nos daba
Física. Era serio y triste. De mí decía que me movía por impulsos, que además
no eran armónicos, que tenía días que estudiaba todo lo estudiable, y hacía
todos los problemas, y los intercalaba con días que no daba un palo al agua.
Como era muy
serio, no le agradó el día que me pilló sobreactuando para contar el antiguo
chiste del Obispo que visita a un párroco rural que, a las preguntas de su
Eminencia, contesta que cuando se aburre se tumba a la bartola. Lo que agrada
al superior ya que considera que el párroco practica el relax, pero le cambia
el concepto cuando el párroco estentóreamente grita “¡Bartola, tráete el anís!”
El trabajo en
casa consistía en practicar la resolución de innumerables problemas de todas
las asignaturas. En teoría, entrenabas para el
escenario que te ibas a encontrar en las pruebas de Ingreso. Antes he dicho que
eran absurdas y mis razones son:
-
En Aeronáuticos te dejaban utilizar durante el
examen todos los libros que pudieras transportar, todos los apuntes y todas las
colecciones de problemas resueltos
-
En unas escuelas los problemas eran cinco, y en
otras diez o más.
-
En cada Grupo de Ingreso había varias
eliminatorias que solamente te servían para la convocatoria presente
-
En Industriales, donde no te dejaban ni un
formulario, por norma uno de los problemas era una complicada operación a
resolver con ayuda exclusivamente de la regla de cálculo, instrumento manual y
arcaico que te daba una precisión máxima de dos décimas. Levantabas la mano,
daban a todos una hoja con el mismo problema. A la palmada empezabas a resolver.
A los tres o cinco minutos, otra palmada te obligaba a soltar el lápiz como si
quemara y alzar el brazo
-
En Industriales, previo al primer Grupo debías
pasar un examen de francés, otro de inglés y un tercero de alemán. Parece ser
que por un error de la mecanógrafa, en las especificaciones originales de la
prueba, en lugar de escribir francés, inglés o alemán, escribió francés, inglés
y alemán.
-
La broma era que tenías, sin venir a cuento, un
examen de alemán. Fui con un diccionario del tío de mi amigo Luis Dúfrene, cuya
tipografía era la antigua fuente gótica alemana.
-
Ante el despiste general decidimos que cada
fila de los que nos examinábamos tradujera una línea y la intercambiara
discretamente con las líneas del resto, para completar el puzle germánico. Fue
un desastre, al que no pude contribuir porque fui incapaz de pasar una sola
palabra del germánico puro y gótico al castellano rancio y plano de Gila. Nos
aprobaron por aburrimiento.
 |
| Diversos modelos de reglas de cálculo, de mi uso particular |
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BAGATELAS POLITICAS
ELECCIONES
QUE NO ERECCIONES
Por Inés España
Vivimos en plena erótica del
poder.
El PODER, dicho con mayúsculas,
es el motor de los esfuerzos políticos
Alcanzarlo es orgásmico para
estos mozos cuya única ilusión es conseguirlo, aunque sea en un “menage a
trois”
Las zarandajas del bien común, de
la bonanza de los compatriotas, de las mejoras
sociales, de la integración y de tantas cosas preocupantes para todos, quedan
aparcadas
Unos pocos luchan entre sí y unos
muchos empezamos a aburrirnos con los debates, porque al final lo que en ellos
se dice ni nos va ni nos viene
La intersección de San Prudencio no se ha notado
en las peleas televisivas, como de gallos
de corral, de los
debates
El “Y tú más” ha imperado
Voy a ir a votar, pero no sé si hacerlo con la peineta y mantilla que
mi santa madre se ponía en los días dolorosos de la Pasión
Por supuesto que no sé a quién
encenderle la vela, con perdón
 |
Cola o fila delante de un colegio electoral |
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EL
BUEN VIVIR
MENÚ ELECTORAL
Por Luigi Palatino
Hoy domingo es festividad doble, San
Prudencio y Santas Urnas.
En la mia trattoria de Socuéllamos,
hemos dispuesto un menú acorde al día, con la logística del buffet. (Que cada
uno tome lo que pueda)
Hemos
colocado una mesa larga, sobre la cual situaremos las distintas fuentes. Detrás
de ella, un chef de mesa y 4 camareros interventores en la ayuda a los
comensales. Comensales obligados a presentar
previamente el ticket
justificante del abono del importe del condumio.
Distintos y diversos platos conformarán este
menú en un día tan señalado:
- - Chorizos picantillos, unos en salsa azul de lombarda, otros en salsa de pimientos choriceros
- - Caretas de cerdo o de ternera a elegir según aficiones y dureza de las mismas
- - Sobres de manitas en revuelto de huevos
- - Tentáculos de pulpo gallego sin reblandecer
- - Frituras de variedades unidas y poderosas
- - Tortilla autonómica
- - Humus de garbanzos de calidad sobre lecho placentero de comisiones
- - Duelos y quebrantos
De postre
- - Rosquillas tontas y listas. Las primeras más abundantes
- - Buñuelos de viento, o sea vacíos de chicha
- - Macedonia de componendas
- - Naranjas exprimidas de Valencia
No habrá huesos de santo debido a la
festividad del día y a la situación laica del país.
Por supuesto que el vino será un carísimo
Vega Sicilia, muy promocionado en los años de la transición como bebida
obligatoria en almuerzos de trabajo y reuniones sectoriales, pagado por los
ciudadanos de Socuéllamos.
La alegre Buhardilla
Separata cultural
Edición conjunta El noctambulo de Hoy 28 Abril 2.019 nº 41
Precio: 2 reales
ESQUINA OESTE: CINE
Por Julia Blanc-sec
“A la vuelta de la esquina”, amor y fraternidad
en el supermercado
« Después
de todo, se puede ser feliz en una catedral del consumo. Un cuento de hadas
moderno, magistral y optimista”
(François Forestier – NouvelObs)
Un hermoso y original drama intimista alemán
situado en un decorado poco habitual: las enormes estanterías donde el gran
hipermercado tiene almacenados todos los productos que deben irse reponiendo a
medida que los agotan los clientes.
Un relato romántico dividido en tres grandes
capítulos que tratan sobre la vida de tres empleados, tres historias de
dimensiones emocionantes que evolucionan al ritmo que marcan los palés y las
carretillas elevadoras que se trasladan incansablemente por los pasillos de ese
laberinto desconocido, en el que se mueve una comunidad de trabajadores
solidarios que ni siquiera adivinamos que existen.
El introvertido y solitario Christian (Franz
Rogowski, “Transit”) empieza a trabajar en un gran hipermercado de Dresde.
Bruno (Peter Kürth, “BabylonBerlin”), jefe de la división de bebidas, le toma
bajo su protección y le enseña el oficio. En el pasillo de los dulces conoce a
Marion (Sandra Hüller, “Toni Erdmann”), de la que se enamora. Se encuentran en
la máquina del café y en cada encuentro crecen los sentimientos de Christian
acabando por ser su único aliciente ya que pasa la jornada subiendo y bajando
cajones de botellas, siempre bajo la incómoda luz de interminables neones que
alumbran gigantescos pasillos de inalcanzables estanterías. Pero Marion está
casada y un día no acude al trabajo…
Tercer largometraje dirigido por Thomas Stuber (“Herbert”,
“TeenageAngst”), “A la vuelta de la esquina” –basada en un relato breve
escrito por Clemens Meyer- se apoya en la química que se va generando entre
todos los protagonistas de esta historia de la vida misma, que han sido
ciudadanos de dos Alemanias bien distintas y están llenos de recuerdos y
nostalgias, y sobre todo en la pareja formada por Sandra Hüller /Franz Rogowski
quienes, he leído en una publicación francesa, “son el
dúo de actores de moda en la cinematografía alemana”. No me extraña: en
mitad de ese universo geométrico formado por barras verticales y estantes
horizontales con los que se ha compuesto esta hermosa producción, ellos son
capaces de generar ternura, emoción e incluso algunas moderadas dosis de
felicidad. Lo que decía: como la vida misma.
ESQUINA OESTE: TEATRO
Por Julia Blanc-sec
Abajo
el telón del Guiñol más antiguo de París
Algo va
mal en París. La semana pasada se quema Notre-Dame y este domingo se baja por
última vez el telón del Guignol des Champs-Elysées. Situado en el ángulo de las
avenidas Matignon y Gabriel, en el distrito 8, un teatro creado en 1918 por la
familia Guentleur (hasta entonces una troupe
itinerante), que lo estuvo gestionando durante cinco generaciones con la misma
pasión que se transmiten los conocimientos las familias de domadores,
trapecistas o payasos en el circo.
Pero,
desde 1979, quien ha estado moviendo las marionetas ha sido José Luis González,
“el español” o “el asturiano” para quienes, allá por los años ’60, le
conocieron recién llegado a País, con 20
años, procedente del maquis (grupos de resistentes, “maquisards”, que se
escondían en zonas poco pobladas, bosques o montañas) de la posguerra en su
Asturias natal.
José Luis
-a quien conocí algunos más tarde, cuando ya trabajaba con marionetas, tenía
una novia muy guapa, profesora de español, llamada Michelle, y era amigo de
Paco Ibáñez- quería ser actor de teatro y estaba
ensayando una obra de Armand Gatti, que prohibieron las autoridades (eran
tiempos de censura en distintas latitudes). Sin decepcionarse, autor y actor
transformaron la pieza en espectáculo para marionetas, lo que para “el
asturiano” significó un descubrimiento decisivo. Años después, conocería a
Auguste, el último de la saga Guentleur, se hicieron amigos y acabó
reemplazándole un día que se encontraba enfermo.
Desde
entonces, el Guignol des Champs-Elysées ha venido ofreciendo tres espectáculos
diarios de humor corrosivo al aire libre los miércoles, sábados y domingos –a
las 15h, 16h y 17h- durante los períodos escolares. Las últimas entradas se han
vendido a 4€.
La
palabra Guignol significa el teatrillo donde aparecen los personajes pero
también es el nombre de la marioneta principal, que en este caso viste chaqueta
verde y sombrero negro; le acompañan en el escenario, Polichinela, Pulguita, la
Muerte, el Fantasma…. En 2018, el Guignol de José Luis (que ya ha cumplido 83
años), el teatrillo situado en pleno corazón del Jardín de los Campos Elíseos,
celebró su bicentenario: “En el Guignol todo es verdadero y todo es falso. Su
misión es la risa”.
Era un
soleado domingo de junio cuando “el asturiano” – “cabellos grises desgreñados,
camisa larga vaquera y un sombrero con visera sobre la frente”, según
definición de la reportera del canal France
3- hacía esta declaraciones ante los
representantes de la prensa parisina, muchos de los cuales habían asistido
alguna vez a sus funciones. A los actos de celebración asistieron varias
compañías de marionetas extranjeras.
“Si, el Guignol es para reír, pero también para
despertar en los niños el gusto por la palabra y la descripción. Guignol es un
embajador de la lengua. Debería figurar en los cursos escolares al menos media hora
a la semana. Los niños aprenderían a expresarse sin miedo, con autenticidad”,
asegura José Luis, que tiene un repertorio de diez funciones y defiende “la
dimensión social del Guignol. “Nos hace sentir juntos, nos impulsa a compartir
la alegría”.
Tras unas barreras de madera cubiertas
de telas multicolores, en bancos instalados a ras del suelo, “los amigos de
José Luis, una mayoría de sexagenarios entusiastas”. Primo hermano de Guignol,
un castizo Don Cristóbal llegado con la compañía del Teatro Arbolé de Zaragoza,
atacaba con contundencia a un fantasma que quería robarle sus sandías. El
bastón, emblemático del teatro de marionetas, provocaba las carcajadas del
respetable.
La
gestualidad cómica de las marionetas, maliciosas y gruñonas, que se burlan de
los poderosos, lleva siglos alimentando en todo el mundo una imaginería popular
que ha llegado hasta nuestros día haciendo reír a generaciones de niños
El Guignol de los Campos Elíseos
no es el único existente en París. Otros jardines –Parc Floral, Ranelagh,
Jardind’Acclimatation, Buttes-Chaumont…- tienen su propio repertorio que van
renovando, a medida que mutan los tiempos, con creaciones originales.
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EL OIDO MÚSICAL
PAROXISMOS
Por
Ludwig von Krefeld
El título no es mío. En este ciclo 18/19 de la
ONCE, el programador ha calificado cada concierto de alguna manera que supongo
con sentido para él.
Levaba tiempo sin subirme a las alturas del
Auditorio. No es que levitara, es que mi entrada
está casi por encima del tejado.
Tenía algunas críticas de conciertos
anteriores, pero el parón editorial decidido por el Director las ha privado de
actualidad
En el Concierto del viernes 26 de abril, las
alineaciones fueron las siguientes:
- - Director: KRZYSZTOF URBBANSKI, llamado en casa El Flaco, ya que si lo haces por su nombrecito de pila te puede dar un cierre quirúrgico de la laringe
- - Solista al piano: BENJAMIN GROSVENOR. A este sí le puedes llamarle por su nombre, incluso Benjaminito
Los dos finitos, pesos pluma, vestidos de negro
de etiqueta; el innombrable con un clavel
reventón rojo en el ojal.
Se sorteó el campo y se cambió el orden de
intervención:
Primero el Concierto para piano número 1 en re menor opus 15, de JOHANNES BRAHMS
Segundo la Sinfonía nº 5 en do menor opus 67, de LUDWIG VAN BEEETHOHOVEN
En la pista 54 profesores y 18 profesoras (25%), todas ellas a
las cuerdas
Además, el virtuoso y el boss o director de la banda.
Despliegue de instrumentos de viento. Ambiente
clásico y móviles apagados.
El programa prometía y todos sabíamos a lo que
íbamos
E
l Concierto para piano, comienza con una
explosión que me hace imaginar la botadura de un trasatlántico, empujando
enormes olas que se precipitan sobre nosotros. Como explicaba el programa de
mano, el principio “es un puro grito que nos sumerge en el vacio”
Siguiendo mi manía cromática, el Concierto me
pareció una precipitación de colores oscuros, grises o negros. No quiero decir,
ni mucho menos, que no fuese brillante pero hasta el final, que vemos la luz, es
todo él una oscuridad desgarradora en un dialogo de pares, orquesta y solista.
De los tres movimientos, el Maestoso me
impactó, en el Adagio me sumergí y el Rondo me volvió a la vida
Director y pianista con gestualidad sobria y
adaptada a cada momento
Sobre
la Quinta Sinfonía ya se ha dicho todo, y a
Herr Beethoven le deben pitar los oídos, sobre todo si San Pedro-Gaes le ha
proporcionado audífonos
Se ha
definido a la QUINTA como la mayor expresión del romanticismo alemán.
En el primer movimiento hay magníficos
silencios. En mi ignorancia o inocencia musical me pareció que el Director los
prolongaba demasiado, y de alguna manera me
perdía la debida ilación. (Tal vez por mi nerviosismo congénito, unido a mi ansiedad e impaciencia para seguir
escuchando).
Recuerdo una vez que escuché la QUINTA en Praga, acompañado de una
jovenzuela que aplaudía a todo lo que yo decía.
A la salida del Concierto le conté lo
de los silencios, y me entendió ya que
empleó una frase lapidaria:
- Estoy de acuerdo. Es como si se le hubiese
cortado la mayonesa.
El segundo movimiento es
triunfal en un espasmo final de timbales que abren la puerta a la sonoridad del
último movimiento, que nos empuja contra el respaldo y que, debido a mi situación en las alturas, casi me proyecta al cielo.
Después de esto, cenar unos chorizos es sacrilegio.
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Leyendas Urbanas
Al final de la
década de los 60 el tema de conversación era la longevidad en activo del
entonces Jefe de Estado, que unos veían con temor, ansiedad o preocupación, y otros como bendición divina
En el día de su
cumpleaños, un embajador hispanoamericano se presentó en El Pardo con el
animalito de la lámina adjunta al que, y como se ve, le habían enseñado a
marchar con el paso de la oca.
Al hacer la entrega
a Su Excelencia, el embajador comentó que posiblemente su vida alcanzaría los
100 años, (la de la tortuga), a lo que El Invicto contestó:
-Quite, quite, señor
embajador, y llévese el animalito, que se les coge cariño y cuando se mueren se
lleva uno un disgusto.
El Matritense
castizo
AL DIRECTOR QUE LE
DEN
Sr.
Director:
Ud.
que tiene influencias, consiga que la flor de la imagen sea considerada
emblemática de estas elecciones.
Doña Flora
Ilusa, viuda de Tiesto
Sr. Director:
Mi
más enérgica protesta. Los que mandan no permiten que envíe mi voto por paloma
mensajera. Es una discriminación fascista
Porretas
Columbus, jubilado de RENFE
 |
| Cerrado por defunción |
 |
| ¡ A ver quién pisa al ratón! |
 |
Viviendas de protección oficial en el Tibet |
 |
| Promoción inmoboliaria, residencial, en el Amazonas |
 |
Luego dirán que el agua aquí es cara |
El
noctámbulo, nº 41 / 4ª Época / 28 de Abril
de 2.019 Página
21
Cumpliendo la reglamentación
vigente, señalamos que el Propietario y Director de El
noctámbulo y de Posada Literaria es el señor don Luis Díaz Garrido, mayor de edad en exceso,
español. proisa@digimedia.es
